He leido que uno de los blogs de Weblogs S.L. va a cerrar, se trata de Vive la ciudad y parte del anuncio menciona como dejará de existir el sitio:

Este post es el último que publicaremos en esta plataforma, y estará online hasta el 30 de enero de 2009, fecha en la que apagaremos la luz, y Vive la ciudad | Madrid dejará de estar accesible.
Lo primero que pensé al ver esa nota fue que se producirá otro caso de enlace roto. Y se que es muy frecuente que haya sitios que cambien las direcciones o incluso que desaparezcan, a veces es inevitable, pero en otras muchas otras ocasiones creo que habrÃa que intentar evitarlos. Creo que es lógico pensar que a medida que los contenidos generados dependan más de cómo puedan ser rentabilizados, más ocurrirá que habrá direcciones que dejan de funcionar y la Interweb se irá transformando en algo más temporal y efÃmero.
Si ya hace 10 años en un artÃculo de Nielsen sobre enlaces rotos se indicaba el grave problema que suponÃa ¿qué podemos esperar hoy en dÃa? Cada vez que veo un elblockbusteractual-themovie.com pienso cuánto tiempo existirá esa dirección ¿merecerá la pena enlazarlo sabiendo que dentro de uno, dos, quizás tres años ese enlace dejará de funcionar?.
Proyectos como The Internet Archive y su Wayback Machine pueden ayudar a que algunos enlaces puedan rescatarse para poder comprender el contexto, pero no siempre es asà y no estoy seguro de que sea la solución. Creo que serÃa mejor intentar mantener alojado el contenido, en la mayorÃa de casos no serÃan necesarios muchos recursos si se planea un poco, y hay muchas posibilidades para solucionar los problemas que se producen si se reestructura la web (¡mod_rewrite al rescate!), asà que me parece bastante pecaminoso dejar que esas ocurran.
Una parte de la web 2.0 parece que eran las URL amigables, ¿quizás haya que esperar a la web 3.0 para que además sean permanente? ¿o sólo sirven para técnicas SEO y aumentar la rentabilidad? Espero que algún dÃa podamos enlazar una dirección con la tranquilidad de que pasados los años seguirá allÃ, por ahora me temo que no es asÃ.